¡Si la primavera pone las flores, nosotras los tocados con flecos de plumas! Has leído bien, ahora que el buen tiempo parece que si viene para quedarse y empiezan a surgir las dudas sobre cómo vestir en los próximos eventos, bodas y comuniones que se nos plantean, tenemos una decisión importante que tomar ¿Queremos ser una más o marcar nuestro propio estilo de sutil contraste? Nuestra determinación es vital, ya que podríamos sentir que al elegir un tocado con flores de cualquier tipo, sean de papel, seda, foam o terciopelo, estaríamos haciendo una elección armoniosa con el ambiente y el clima, pero la vida nos da la posibilidad de definirnos únicas ¿Qué te parece la idea?

Está claro que si nuestro tocado va a llevar flecos de plumas, estas provendrán de algún animal, entre las más llamativas y usadas están las plumas de avestruz, las plumas de faisán, las plumas de oca, las plumas de pavo y las plumas de gallo o pato. ¡No te preocupes, en Tocados y Abalorios puedes disponer de todas! Además, vamos a darte unos pequeña guía para saber cómo elegir. Las plumas de avestruz son grandes, anchas y coloridas, ideales si nuestro carácter es extrovertido y alocado. Si a pesar de nuestra determinación no nos gusta ser el centro de todas las miradas, podemos usar otro tipo de plumas como la de faisán, con colores más metálicos y sobrios, de gran elegancia y personalidad. Por último, las plumas de gallo, pavo o pato son ideales para combinar entre si y realizar grandes trabajos artesanales con los que mostrar nuestro cuidado de los detalles y nuestra implicación con nuestra forma de vestir.

En definitiva, los flecos de plumas son una alternativa ideal para adornar nuestros peinados y tocados, y también, para contar algo de nosotras a través de los looks de los días más especiales de nuestra vida. ¡Cuidado con la primavera que la sangre altera pero no nuestras decisiones! A la hora de elegir, tenemos que pensar si lo que queremos es construir un recuerdo ideal para toda la vida o una anécdota sobre nuestro estado de ánimo de ese preciso instante en el que se  desarrolló el evento. Nosotras somos más de lo primero que de lo segundo, pero todo es válido. Lo más importante de todo es estar agusto con nosotras mismas y darle valor a cada detalle que escojamos para poder disfrutar al máximo cada experiencia.

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